Hace tiempo que en Boca Juniors se suceden distintos hechos y los resultados que se obtienen son los mismos. Pasan los entrenadores, pasan jugadores pero el final es el mismo: los Xeneizes lejos de la pelea por ya casi tres años, conflictos varios entre jugadores, dirigentes y entrenadores, todos versus Riquelme o Riquelme versus todos. ¿Qué es lo que pasa en el club de La Ribera? ¿Quién es el responsable de este momento? La cuestión, desde mi punto de vista, es que echándole la culpa a román desvían miradas de los verdaderos problemas. El deslindar responsabilidades en el 10 significa que nadie se ocupe de porqué renuncian dirigentes, de porque se toman decisiones desacertadas, de porque Boca no produce jugadores desde las inferiores y los que apuntan a algo desaparecen (caso Paredes). Desde Ischia para acá, pasaron Basile, Albes, Borghi hasta llegar a Falcioni en estos días. Y el síntoma de juego es igual: Boca no juega a nada y todo ese respeto que ganó en décadas doradas ya casi no se tiene. Los jugadores son los que entran en la cancha y van cambiando pero juegan todos a lo mismo. Riquelme es el que puede hacer la diferencia pero ha pasado más tiempo lesionado que jugando. Así y todo da la sensación de que puede jugar en una pierna pero lo discuten. Cuando está el y Boca no gana es por su culpa. Cuando no está el y Boca pierde se lo pide a gritos. Se lo responsabiliza por todo cuando es un deporte de equipo y se evidencia una zaña especial en contra del 10, una zaña que no hay en contra de nadie, incluido Palermo aún cuando este pase varios partidos sin convertir.
Los entrenadores se han sucedido, como dije antes, sin éxito desde el 2008. Ni Basile se salvó teniendo el colchón de cinco títulos ganados en igual cantidad de torneos. Nadie ha conseguido un buen nivel de los jugadores, cada uno ha traído a sus jugadores fundamentales (Borghi a Caruzzo, Falcioni a Erviti) pero no han rendido. Los diferentes estilos no han mermado el nivel y es por eso que ningún sistema se puede decir que sea el más apropiado para este equipo. Se pasó de la cuestionada y famosa línea de tres de Borghi a una de cuatro del "infalible" Falcioni y los errores fueron los mismos.
En cuanto a los dirigentes, desde que falleció Pedro Pompilio la comisión directiva se ha convertido en un conventillo y una puja de intereses de cara a este 2011, año electoral. Con Ameal a la cabeza diciendo que no sabía nada de fútbol y con la lucha a flor de piel por la renovación de Riquelme, la CD fue la que ha tomada decisiones que más que esto pueden vislumbrarse como "manotazos de ahogado". Se pasó de Basile, dt que le gusta jugar, a Albes que es más conservador y polémico. Luego se buscó a Borghi inmediatamente después de sacar campeón a Argentinos Jrs., como si eso le asegurara un campeonato. El Bichi duró menos de un torneo en esta vorágine por conseguir resultados que se los devora. En el medio el Tito Pompei y van a buscar a Julio Falcioni. De un extremo a otro, ya que Pelusa se caracteriza por ser conservador, por esperar al rival, por su rigidez táctica y su inflexibilidad esquemática. La cuestión es que el balance de este último es deficitario y encima se debate entre su esquema o poner a Riquelme y Erviti juntos. Le falta tiempo y desde aqui defendemos los proyectos y la continuidad de los dts.
Entonces de quien es la culpa? De los que toman las decisiones? De los que dirigen al equipo? O de los que entran a la cancha? Ustedes que opinan?
Yo creo que es una combinación de las tres y mientras sigan de esta manera, los hinchas de Boca seguirán sufriendo el paso del tiempo sin éxitos.
Abrazo!
